domingo, 15 de agosto de 2010

Asociaciones de la Prensa


Que levante la mano el menor de cuarenta años a quien pertenecer a la Asociación de la Prensa le haya servido de algo, como no sea pintar la mona con un carguito.

Que levante la mano quien al terminar la carrera haya corrido ilusionado a inscribirse en la Asociación de su provincia y no haya comprobado enseguida que la cosa queda, como mucho, en un número de registro, un carnet y una cuota.

Que levante la mano quien considere que pertenecer a la Asociación de la Prensa le ha servido para algo más que para seguro médico (donde eso ocurra), cesta en navidad (donde aún se mantenga la costumbre) o, en el caso de Sevilla, para un pase de entrada a la caseta en la feria.

Que levante la mano quien, desamparado por la empresa para la que trabaja, haya gozado del apoyo de la asociación cuando su puesto de trabajo, su sueldo, su futuro o su dignidad hayan estado amenazados.

Ni como lobby valemos. A los médicos no hay quien les tosa. Los abogados no digamos. Y si hablamos de los arquitectos… Así podría seguir con todos los colegios profesionales… menos el periodístico.

Salvo cuatro “estrellas” o veinticuatro cargos ejecutivos, el resto somos carne de mileurismo, de una cada vez mayor precariedad en el trabajo ante cuya evidencia las asociaciones de la prensa miran para otro lado.

Pero yo los entiendo

Poco pueden hacer… salvo disolverse

J.T.

2 comentarios:

ElCordónDeMiCorpiño dijo...

Los colegios profesionales multitudinarios, que no paralizan el país, ni tampoco sindicatos, valen para mucho. Si sirve de algo, vaya esto de muestra.

Después de haber metido a media familia de conocimiento carnal o políticamente correcta incapaces de ganarlo en los laborales de la Junta, ahora erremeten contra personal de la función pública estatal que tuvo que competir en la capital del reino una plaza especializada entre miles de opositores y tras varios años de preparación:

"SEVILLA, 27 (EUROPA PRESS). El Consejo de Gobierno ha aprobado el decreto-ley de reordenación del sector público de la Junta de Andalucía, que supondrá un ahorro total de más de 100 millones de euros hasta 2013, así como la desaparición de 111 entidades instrumentales y la modificación o transformación de otras 16, al tiempo que se garantiza el mantenimiento de los empleos. El decreto se someterá a la convalidación del Parlamento en una reunión de la Diputación Permanente el próximo jueves.

La consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo, ha manifestado en la rueda prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno que el decreto tiene como objeto dotar al conjunto del personal empleado público afectado por la reordenación (un total de 23.476 personas) de la máxima seguridad jurídica para la salvaguarda de sus derechos. En concreto, del personal FUNCIONARIO, se ven afectadas 2.069 personas; del personal laboral de la Junta, 1.474, y del personal laboral que no es de la Junta, 19.933 personas.

La consejera se refirió a la supresión de 182 puestos DIRECTIVOS, aunque las personas hasta ahora titulares de los mismos NO se DESPIDEN, sino que VUELVEN a sus puestos de ORIGEN".

Las mayúsculas son mías.

Anónimo dijo...

Y no se cae ninguna máscara. Si hay que ahorrar RECURSOS, eso somos, maldita sea, humanos, ¿por qué no lo hicieron desde el principio?

Malditos sean quienes descansan sus pies sobre las vidas que transforman en carnaza.

Que la historia no los ignore. Que las historia genética borre su rastro.